El cadáver en esqueletización estaba a unos metros de un hoyo de un metro de profundidad. El cráneo tenía un orificio grande en el lado derecho y le hacían falta los dientes incisivos. Al parecer fue golpeado antes de morir.
Un policía señaló que el cadáver podría ser de un joven de 17 años que su madre reportó como desaparecido y que vivía entre las colonias Lomas del Oriente y 6 de Junio, pues en el lugar se encontró un ticket de cervezas compradas en la colonia 6 de Junio además de la ropa.
Un detenido, que confesó ser el asesino del desaparecido, contó en febrero fue a tomar cervezas con el desaparecido en un predio de la colonia Plan Chiapas, cerca de donde apareció la osamenta y que después discutir lo mató y enterró el cuerpo.
El policía dijo que talvez el asesino no lo enterró sólo lo tiró al hoyo y por eso la fauna carroñera lo devoró y esparció los restos por el terreno.